Con la entrada en vigor, el pasado 26 de Septiembre de 2015, de la normativa europea de Ecodiseño (ErP) y de Etiquetado Energético (ELD), las calderas de condensación, que hasta el año 2007 eran unas absolutas desconocidas en España, han pasado a representar en el 2015 el 60 % de las calderas murales vendidas en el mercado español. De cara a 2016, se espera que constituyan prácticamente el 100%.