El proceso de compra de una caldera casi siempre se da en el peor momento: cuando se rompe. En estas circunstancias, como usuarios necesitamos una solución rápida que nos devuelva un bien básico: el agua caliente y, si estamos en invierno, la calefacción. Cuando uno se ve en esta situación necesita que la cadena de suministro sea sencilla y ágil, por eso en este post queremos explicaros cuál es el rol y responsabilidad de cada implicado y algunos consejos para que sepamos bien dónde acudir, con quién contar y qué exigir en cada caso.

Tipos de calderas para Agua Caliente Sanitaria

La producción de agua caliente consiste en calentar el agua fría que entra en la caldera antes de ser utilizada para usos sanitarios a través de grifos o duchas. Existen dos formas de producir agua caliente en una caldera: bien de forma instantánea en el caso de las calderas murales o calentadores instantáneos;  o bien por acumulación, como ocurre en las calderas con acumulador incorporado o exterior.

La producción de agua caliente consiste en calentar el agua fría que entra en la caldera antes de ser utilizada para usos sanitarios a través de grifos o duchas. Existen dos formas de producir agua caliente en una caldera: bien de forma instantánea en el caso de las calderas murales o calentadores instantáneos;  o bien por acumulación, como ocurre en las calderas con acumulador incorporado o exterior.

placa solar

El aprovechamiento de la energía procedente del sol puede conseguirse mediante diferentes sistemas de captación: térmica o fotovoltaica. La tecnología fotovoltaica aprovecha la radiación del sol para generar electricidad gracias a las características químicas de ciertos materiales semiconductores. El impacto de la radiación solar sobre dichos materiales (efecto fotoeléctrico) genera una corriente continua y, gracias a este proceso, los módulos fotovoltaicos generan energía en el momento en que la luz incide sobre el material.