Una temperatura de consigna adecuada ayuda a ahorrar en calefacción y ACS y mejora el rendimiento de los equipos En una instalación individual nos encontramos con 3 tipos de temperaturas de consigna posibles: Temperatura de calefacción Es la temperatura a la que queremos que trabaje la caldera cuando la utilizamos para calefacción. Esta temperatura puede variar en función del tipo de caldera y de instalación: Si la caldera es de condensación, la temperatura adecuada suele ser 55-60ºC. No obstante, en los días más fríos puede suceder que trabajando a esa temperatura la instalación no logre la temperatura ambiente que queremos, en cuyo caso habría que subirla a 65-70ºC. Si la caldera no es de condensación, la temperatura deberá ser más[…]

Una temperatura de consigna adecuada ayuda a ahorrar en calefacción y ACS y mejora el rendimiento de los equipos En una instalación individual nos encontramos con 3 tipos de temperaturas de consigna posibles: Temperatura de calefacción Es la temperatura a la que queremos que trabaje la caldera cuando la utilizamos para calefacción. Esta temperatura puede variar en función del tipo de caldera y de instalación: Si la caldera es de condensación, la temperatura adecuada suele ser 55-60ºC. No obstante, en los días más fríos puede suceder que trabajando a esa temperatura la instalación no logre la temperatura ambiente que queremos, en cuyo caso habría que subirla a 65-70ºC. Si la caldera no es de condensación, la temperatura deberá ser más[…]